San José, festivo nacional en el que se celebra «el día del padre». Aquí, en tierras valencianas, día de cierre de las tradicionales «Fallas», que dan paso un año más a la primavera: cambio de estación, equinoccio primaveral, primer punto de Aries… todas estas cosas guardan relación: el origen de las fallas está precisamente en el cambio de estación.
La palabra falla, del valenciano medieval, viene del latín fac[u]la, diminutivo de fax, antorcha.
Sería el gremio de carpinteros el que iniciara un ritual en honor a su patrón (San José), en el que quemaban virutas, sobrantes de los talleres y sus «parots» (traducido al castellano: «palotes», que eran unas esctructuras de las que se servían para colgar los candiles e iluminarse y que no necesitarían cara a la primavera, que el día alarga y hay más luz) en una «hoguera purificadora».
Poco a poco, se convirtió en una tradición que se hizo extensiva. La gente sacaba los trastos viejos a la calle y los apilaba para ser quemados, en un fuego renovador. Se deshacían de sillas, libros, ropas… , que el fuego consumiría en hogueras (antorchas, fallas) repartidas por toda la ciudad.
Se empezaron a dar forma humana a los trastos (Las fallas empezaron siendo cajones altos con tres o cuatro muñecos vestidos con ropas de tela, y con caretas de cartón), creando monumentos satíricos y burlescos en los que se exponían a la vergüenza pública y se quemaban simbólicamente personas y situaciones de la calle o barrio donde se plantaba la falla.
En su construcción participaban los vecinos de cada calle… y así, con el tiempo, se les fue dando un sentido social que transcendió y se convirtieron en monumentos artísticos y artesanales, pero el lado artístico no ha impedido que hoy en día, continue la sátira, la crítica y la burla… y la gente, cansada de tanta crisis, tanto discurso político y tan falta de risa, encuentre una vía común para mofarse hasta de su sombra, «quemar» lo peor del año, aunque sea en algún lugar simbólico de su conciencia, y recibir a la primavera, con la esperanza de un aire nuevo y transformador.
San José, el Patrón de los carpinteros, sigue siendo la figura religiosa masculina a quien ofrecer la cremà, y la Maredeueta -como se conoce «en casa» a la «Mare de Déu» (La Madre de Dios, La Virgen), que es La Virgen de los Desamparados– la figura religiosa femenina a quien rendir homenaje como intercesora incondicional de todos los clamores del pueblo, como patrona de Valencia. Familiarmente, los valencianos la llaman «Geperudeta» (geperuda es joroba. El nombre hace referencia al gesto característico de la imagen, la cual está ligeramente inclinada hacia delante).
Al final, la fiesta Josefina -declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional– es una llamada a la que me uno y os invito: apilemos todos los trastos viejos y quememos todo lo que quedó obsoleto; renovemos fuerzas e inquietudes; unamos nuestras esperanzas en la luz y el aire fresco de la primavera!
Un cambio de estación, una oportunidad para poner un punto y aparte…
Y mientras ordenamos ideas y pensamos lo que quemar, compartamos uno de nuestros arroces valencianos más tradicionales y populares, elaborados con ingredientes de la huerta: Arròs amb bledes o Arroz con acelgas.
Feliz día a todos los padres! Felicidades a todos los Joses, Josefas, Pepes y Pepas!! Feliz primavera!
Receta Arròs amb bledes o Arroz con acelgas
Según la forma tradicional
Ingredientes (para 6 raciones)
1 cebolla
4 ajos
1 chorro de AOVE
1 tomate grande rallado natural (unos 80 g si el tomate es triturado en conserva)
1 cucharada rasa de Pimentón de la Vera ahumado dulce
300 g de acelgas limpias y cortadas en trozos de 3 ó 4 dedos
2 patatas medianas ó 1 grande (unos 260 g en total)
Sal
Azafrán en hebra
1 pastilla de caldo vegetal (opcional)
1 litro de agua
5 puñaditos de arroz (180 g aprox)
1 rama de hierbabuena
1 bote grande de alubias blancas cocidas (400 g escurridos)
Preparación
Picamos la cebolla y los ajos. Echamos un chorro de aceite de oliva virgen extra en la olla donde vayamos a cocinar el arroz y doramos en él la cebolla y los ajos. Añadimos el tomate, dejamos sofreir todo junto a fuego lento un par de minutos y enseguida, agregamos las acelgas. Rehogamos removiendo el conjunto hasta que pierdan su volumen.
Una vez veamos que han reducido bastante, espolvoreamos el pimentón rojo. Seguidamente, añadimos las patatas desgajadas en trozos grandecitos, de unos 2 dedos de ancho (es muy importante que estén desgajadas para que puedan soltar de este modo todo el almidón y espesar el caldo. Para ello, hacemos una incisión con el cuchillo en la patata y tiramos del trozo sin terminar el corte, hasta que la patata se rompa). Luego, ponemos sal al gusto e inmediatamente, vertemos el agua subiendo el fuego a fuerte para que hierva.
Cuando empiece la ebullición del caldo, incorporamos el azafrán, probamos de sal y rectificamos. Si vemos que es necesario, podemos poner una pastillita de caldo vegetal.
Agregamos el arroz y al mismo tiempo una rama de hierbabuena fresca. Dejamos cocer 10 minutos.
Incorporamos las alubias cocidas, removemos, mantenemos al fuego fuerte 5 minutos más y servimos inmediatamente, antes de lo cual retiramos y desechamos la ramita de hierbabuena.
Receta Arròs amb bledes o Arroz con acelgas
Adaptación a Thermomix
3/4 hora
Ingredientes (para 6 raciones)
110 g aprox de cebolla (1 pieza)
4 ajos
110 g de AOVE
1 tomate grande rallado natural (unos 80 g si el tomate es triturado en conserva)
1 cucharada rasa de Pimentón de la Vera ahumado dulce
300 g de acelgas limpias y cortadas en trozos de 3 ó 4 dedos
2 patatas medianas (250 – 300 g aprox)
Sal
Azafrán en hebra
1 pastilla de caldo vegetal (opcional)
1 litro de agua
5 puñaditos de arroz (180 g aprox)
Hierbabuena
1 bote grande de alubias blancas cocidas (400 g escurridos)
Preparación
1.- Preparamos todos los ingredientes para no parar en ningún punto del proceso: rallamos el tomate, en su caso; pelamos y desgajamos las patatas (podemos mantenerlas en agua hasta su uso); limpiamos y cortamos las acelgas (aunque podemos comprar el paquete de acelga fresca limpia y cortada ya…)
2.- Ponemos en el vaso la cebolla y los ajos. Picamos 5 seg/vel 4. Bajamos los restos adheridos a las paredes del vaso hacia las cuchillas con ayuda de la espátula y repetimos la operación.
3.- Agregamos el aceite y sofreímos programando 7 min/Varoma/vel cuchara.
4.- Introducimos en el vaso el tomate rallado y programamos 3 min/Varoma/vel cuchara.
5.- Añadimos las acelgas y rehogamos 6 min/Varoma/Giro a la Izquierda/vel cuchara.
6.- Espolvoreamos una cucharada rasa de pimentón. Luego, agregamos el agua, la sal y el azafrán y dejamos cocer 8 min/Varoma/Giro a la Izquierda/ vel 1, con el cestillo sobre la tapa para evitar las salpicaduras.
7.- Introducimos la patata, que debe estar desgajada (es muy importante que las patatas estén desgajadas para que puedan soltar de este modo todo el almidón y espesar el caldo. Para ello, hacemos una incisión con el cuchillo en la patata y tiramos del trozo sin terminar el corte, hasta que la patata se rompa).
8.- Rectificamos de sal y si vemos que procede, podemos incorporar una pastillita de caldo vegetal. Seguidamente, echamos el arroz y junto al mismo, una rama de hierbabuena. Programamos 16 min/100ºC/Giro a la Izquierda/vel cuchara.
9.- 4 minutos antes de que termine la programación del punto 7, añadimos las alubias. Servimos inmediatamente, antes de lo cual retiramos y desechamos la ramita de hierbabuena.
Vixca!
Mi arroz favorito!
Podría comermelo de una sentada. Es el único plato que repito.
Gracias Paloma. Probaré lo de la hierbabuena.
Voy a ser sincera de corazón: lo de la hierbabuena es un truco de mi suegra Isabel, a quien bien conoces… (no tengo otra, claro!). Hace poco vino a mi casa a comer y precisamente hice este arroz, que -no es por nada- pero para lo sencillo que es, está de vicio… y sí, se repite siempre. De hecho, he puesto 6 raciones, pero estuve dudando mucho entre poner 4 ó 6… porque como todo el mundo quiere «un poquito más», al final no piensas que sobra y luego no hay suficiente…
Bueno, el caso es que yo lo hago -como digo en la receta- sin caracoles, porque no me gustan; ella me dijo: «yo le pongo una ramita de hierbabuena… como si llevara los caracoles…» Oye! Descubrimiento: le da el punto sin tener que añadir el caracol… sencillamente espectacular! De verdad! Pruébalo y ya me cuentas, porque seguro que os gusta!
Au, a pasar-ho bé! Feliz día del padre, Paco! Un gustazo tenerte de comentarista por aquí!
Me gusta la receta, la haré. Conocía los garbanzos con acelgas pero no esta. Gracias por tus aportes históricos sobre las fallas.
Aquí hoy es fiesta pero no se celebra el día del padre, aquí se celebra el tercer domingo de junio.
Un abrazo
El tercer domingo de junio??? Si estamos en marzo!!! ja,ja,ja… no lo entiendo, Rosa! Explica, explica…
En cuanto a la receta, comentar que los garbanzos con acelgas son lo que por estos lares llamaríamos «potaje», pero sin arroz y que al final se pone huevo duro… (haré la receta más adelante).
Prueba esta, que de verdad seguro que te gustará: es muy sencilla, sin grandes ingredientes pero con un resultado muy rico, muy de casa… Muchas muchas gracias por seguir ahí, a pesar de los pesares!! Besos,
En España se celebra el día del padre el 19 de marzo por ser el día de San José, la iglesia católica de por medio. En Venezuela se celebra el tercer domingo de junio, no se sí por influencia gringa. El Día de la Madre se celebra el segundo domingo de mayo, esa si estoy segura que es influencia de EEUU. En fin costumbres de cada país. Un abrazo
Muy bueno, hoy lo he hecho para comer.He puesto garbanzos en vez de alubias porque era lo que tenía en casa…. Me ha sobrado bastante y al haber puesto el arroz, como no lo podía congelar así, lo he triturado todo y lo he congelado en tuppers! ya tengo arreglo para otro dia! jeje Gracias por la receta
Besos
Gracias a tí! Nos has dado una idea para cuando sobre! Je,je.. Me alegro que te haya gustado. Un beso,