Esta es una de mis favoritas!: La crema de calabacín.
El calabacín era una de las verduras preferidas de mi madre, a quien sigo recordando cada día… aunque su plato de verduras favorito era la menestra, una alegre sinfonía de colores y sabores, igual que ella (era la «alegría de la huerta»). Otro día os paso la receta. Prometido.
Yo a veces pienso que me parezco terriblemente a mi madre… otras, como este fin de semana, creo que ni de lejos!: He sido capaz de reñir con mi hermana, con mi padre, con mi amiga y -lo que es peor- conmigo misma, en pocas horas!! Tengo, lo que se viene diciendo: «el genio cagao». Mi madre lo sabía; mi padre lo vive todavía! ellos son quienes mejor me han conocido… mi madre sabía cómo entrarme para encontrar la espina que me hacía saltar… siempre la terminaba sacando…
Eso me recuerda una vez que -siendo yo pequeña y jugando con mi triciclo- perdí la estabilidad y fui a caer sentada encima de una pitera!! Ella me puso boca abajo sobre sus rodillas, con el culo para arriba, al aire. Me llenó de «mercromina» y con toda la paciencia y delicadeza del mundo extrajo una por una cada pincha que tenía clavada en los glúteos… Llevé el culete rojo y con costras durante semanas!! Yo lo recuerdo aún, y eso que deben haber pasado como cuarenta años!!
¡Cómo somos los seres humanos! A veces pagamos con mal humor a quienes menos lo merecen y nos llevamos por delante la sonrisa de las personas a las que más queremos! Cuánto nos falta aún por aprender!
Para suavizar, relajar, disfrutar y compartir: crema de calabacín!! 🙂
Receta Crema de calabacín
Según la forma tradicional
Ingredientes (para 2 raciones)
Agua para hervir
1 patata mediana pelada y troceada
4 calabacines medianos ó 2 si son muy grandes, pelados y troceados (bien lavado, se puede dejar un poco de piel para que tenga más fibra)
1 cebolla pequeña (unos 150 g)
Aceite de Oliva Virgen Extra
1 chorro de leche (la que consumamos habitualmente)
1 cucharada de Sal
Preparación
Rallamos la cebolla (o la picamos finita) y la ponemos a dorar en la sartén con un chorro de aceite de oliva virgen extra. Cuando esté blandita y empiece a coger color dorado, apartamos del fuego y reservamos.
En un cazo, ponemos a hervir los calabacines y la patata (los tendremos preparados a trozos para que tarden menos tiempo en cocer), cubiertos de agua. Dejamos cocer hasta que pinchemos la patata y comprobemos que está cocida. Escurrimos, dejando dos dedos de agua en el fondo del cazo.
Con la minipimer, trituramos este hervido. Añadimos la cebolla y el aceite del sofrito que teníamos reservado y volvemos a triturar hasta conseguir una mezcla homogénea.
Echamos un chorro de leche y una cucharada de sal. Volvemos a triturar. Veremos que la crema se vuelve algo más suave. Según nuestro gusto, si la queremos más densa o más ligera, añadimos un poco más de leche, o no.
Se puede servir fría o caliente.
Receta Crema de calabacín
Adaptación a Thermomix
45 min
Ingredientes (para 2 raciones)
1 litro de agua para el vapor
1 patata mediana pelada y troceada
4 calabacines medianos ó 2 si son muy grandes, pelados y troceados (bien lavado, se puede dejar un poco de piel para que tenga más fibra)
1 cebolla pequeña (unos 150 g) a cuartos
50 g de Aceite de Oliva Virgen Extra
1 chorro de leche (unos 150-200 g)
1 cucharada de Sal
Preparación
1.- Ponemos el agua en el vaso. Cerramos la tapa. Introducimos en el recipiente Varoma los trozos de calabacín y patata, ponemos su tapadera y colocamos dicho recipiente en su posición. Programamos 35 min/Varoma/vel cuchara. Cuando termine, bajamos el recipiente y esperamos que se enfríe un poco la patata y el calabacín. Mientras, desechamos el agua del vaso y lo enjuagamos.
2.- Rallamos la cebolla introduciendo la misma en el vaso y programando 3 seg/vel 5.
3.- Bajamos los trozos que se hayan podido quedar en las paredes del vaso hacia las cuchillas. Incorporamos el Aceite de Oliva Virgen Extra. Sofreímos 8 min/Varoma/vel 2.
4.- Quitamos la tapa e introducimos los trozos de calabacín y patata cocidos al vapor, que teníamos reservados. Añadimos la sal y trituramos 1 min/vel 5-10 progresiva.
5.- Agregamos un chorro de leche. La cantidad dependerá del espesor que queramos obtener finalmente en nuestra crema.
Se puede servir fría o caliente.
Hola Paloma! Tengo una amiga astróloga que dijo que, que no se que cosa estaba en conjunción con sagitario y vaticinaba relaciones difíciles, o algo parecido. Yo soy sagitario y realmente también estaba que mordía. Pero con causa ¡vale!
Se parece a la crema de calabacín que yo hago, con la diferencia que no frío la cebolla, lo hago todo en crudo, y al final le echó un chorlito de aceite de oliva. Ni quesitos, ni leche. Aunque admito que la leche le queda muy bien a las cremas.
Estuve en Barcelona unos días arreglando asuntos personales, y aproveche para darme un salto por Viena y Praga. Las dos ciudades me gustaron. Pero Viena me fascinó.
Llegamos el sábado, para encontrar que el coche que estaba en el taller mecánico, no estaba listo. La parte mecánica si pero no conseguían la pintura. Cosas de este país! Vivo en una urbanización muy bonita a las afueras de Caracas, pero necesitas coche, aunque tengo todo a cuatro minutos de casa, pero no para ir a pie. La nevera esta más pelada que rodilla de cochino. Así que he tenido que ingeniarmelas con lo que tenía en el congelador. Una salsa de tomate, que sirvió para una pasta,y una crema de verduras, que suelo hacer cuando me sobra bróculi o cualquier otra verdura. Lo hice para no dejar nada. Antes cuando viajaba no había problema porque mi hijo se encargaba de comer todo lo que yo dejara. Pero como desde marzo se fue a vivir con una chica , ya no tengo esa ventaja. Te cuento que estoy feliz, porque empezaba a preocuparme la vida de ermitaño que llevaba. En fin, creo que me extendí más de lo necesario. Un abrazo.
Jo, Rosa! Te echaba de menos!!! Y además estuve a punto de escribirte un correo particular, por si acaso las cosas en tu país estaban peor de lo que nos quieren contar… así que me he alegrado doblemente al leerte, sabiendo que estabas en Barcelona, en Praga y en Viena (nada menos).
Praga no la conozco (ya tengo ganas). Viena, sí! Estoy contigo: enamora. Es una ciudad con magia, con luz, con elegancia, con majestuosidad!
Qué bien que estés feliz!! Y qué bien que sea porque ves feliz a quien quieres!!
Sobre la receta de hoy, puntualizaré que a veces no pongo patata y que cuando lo hago es para espesar, sobre todo, porque realmente está tan rica simplemente con calabacín triturado, que no le hace falta adornarla mucho más! Bueno, ahí entran las variaciones que uno tenga por costumbre, como siempre! Y que es lo que convierte cada receta en sabor con toque personal.
Siempre un placer recibirte en esta casa. Gracias por comentar. Besos,
Las cosas por aquí siguen lo mismo. Gracias por preocuparte, por lo menos tenemos salud ¡hasta ahora! Un abrazo
bienvenida al mundo!! Yo siempre pienso que los que nos quieren, nos quieren tanto que hasta nos perdonan cuando estamos asi de idiotas. Por eso les queremos aun mas!
Totalmente de acuerdo! Tú y yo de hecho tuvimos un rifirrafe que nos duró meses sin hablarnos!! (¿te acuerdas de eso, en plena «edad del pavo adolescente»?) Y luego, fíjate! Para el resto. Ni siquiera los casi 1500 Km que nos separan han supuesto una barrera.
Ya tengo ganas de verte! Besos,