Este es uno de mis platos caseros preferidos. Es una sinfonía de colores, de sabores, de texturas, de aromas… que pone la propia huerta sobre nuestra mesa: el pisto.
Lo he comido acompañando tortillas francesas, en bocadillo con lomo, mezclado con huevo duro, en cazuela con pollo o conejo o sencillamente degustado con un buen trozo de pan. Siempre, en cualquier caso, ha sido bien recibido. Siempre único. Siempre jugoso, versátil y recolector de sensaciones y recuerdos.
Todavía -aunque ya andamos metidos en el otoño- las temperaturas se aferran a los «treintas» de los termómetros y parece que el verano no se acabe nunca. Pero poco a poco, se escurren y algunos días ya refresca cuando el sol se esconde.
Todavía hay excedentes de tomates y las verduras de temporada (aunque es habitual encontrar durante todo el año) aún se encuentran a capazos: calabacines, berenjenas, pimientos…
Es un buen momento para cocinarlas y echarles el diente con el punto tibio al que tienta el cambio estacional, así que os dejo una de esas recetas entre las cientos que reclaman la exclusividad de ser la auténtica y original (aunque no podemos negar el origen del pisto, que es manchego, pero perteneciente a la gastronomía nacional por ganarse un sitio en la sencillez de las cocinas españolas de cualquier rincón de España).
Aquí pasa como con el cocido, el guiso de carne, la olla o la tortilla de patatas: recetas tradicionales, caseras, auténticas, que solo alterando un ingrediente o un paso intermedio se conviertan en lo mejor de cada casa para cada cual.
Así es como lo hacía mi abuela, mi madre (que no eran castellanas, sino alicantinas) y como yo misma continúo preparando. Cógete una barra de pan y métele el tiento!
Receta Pisto
Según la forma tradicional
Ingredientes (para 6 raciones)
170 g de pimiento rojo
110 g de pimiento verde
100 g de berenjena sin pelar
250 g de cebolla
280 g de calabacín sin pelar
2 dientes de ajo pelados y laminados
Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
1 cucharadita de tamaño café de bicarbonato
500 g de tomate natural o en conserva, troceado
Sal
Pimienta
25 g de piñones
Preparación
Lavamos y cortamos a dados o trozos pequeños toda la verdura, sin quitar la piel.
Sofreímos en una sartén las verduras y en otra el tomate junto a los ajos y con una cucharadita de bicarbonato. Ambos sofritos con AOVE y con sal; ambas sartenes, deben mantenerse a fuego mínimo hasta que los ingredientes estén listos.
Cuando esté, pasamos las verduras a la sartén donde tenemos el tomate, añadimos los piñones y mezcamos. Dejamos sin apagar el fuego 5 ó 10 minutos más, para que coja todos los sabores y se integren.
Agagamos y servimos caliente o frío.
Receta Pisto
Adaptación a Thermomix
45 min
Ingredientes (para 6 raciones)
170 g de pimiento rojo en trozos
110 g de pimiento verde
100 g de berenjena sin pelar
250 g de cebolla limpia
280 g de calabacín sin pelar
2 dientes de ajo pelados
90 g de aceite de oliva virgen extra (AOVE)
500 g de tomate natural o en conserva, troceado
Sal
Pimienta
25 g de piñones
Preparación
1.- Introducimos en el vaso los pimientos, los ajos, la cebolla y la berenjena. Troceamos 4 seg/vel 4. Volcamos en un plato y reservamos.
2.- Sin lavar el vaso, troceamos el calabacín 2 seg/vel 4.
3.- Añadimos el aceite y las verduras reservadas. Programamos 15 min/Varoma/Giro a la Izquierda/ vel cuchara.
4.- Incorporamos el tomate, la sal, la pimienta y los piñones. Ponemos el cestillo sobre la tapa sin cubilete, para evitar salpicaduras del tomate. Programamos 20 min/Varoma/Giro a la Izquierda/vel cuchara.
como se que siempre buscas ayudar a los ocupados, te indico que el pisto congela muy bien – yo tengo un master!
Lo que yo hago es anyadirle una lata de garbanzos. De este modo el pisto solito ya se convierte en comida completa, y es genial para llevarselo en la fiambrera para comer en el trabajo.
besos guapa!
Pues sí! Buenísima puntualización, así que tomamos nota: IDEAL PARA LLEVAR EN TAPER AL CURRO!! (completar con garbanzos, con huevo o con lo que queráis, porque todo entra… esa es una gran ventaja), y encima podemos aprovechar que elaboramos el pisto un día para hacer más cantidad con destino a congelar lo que no se consuma y así tener comida para otro día!!
Bieeeennn!! Este tipo de intervenciones me encantan porque ayudan y dan ideas prácticas. Gracias, amiga. Un beso,
Hola Paloma. Sin los piñones y el bicarbonato es el ratatuille que yo he hecho toda la vida. Bueno, toda la vida es un decir, desde hace muchos años. A mi me encanta, y aunque sea frío me gusta. En realidad, españoles y franceses compartimos muchas receta, con algunas variantes. Lo de los piñones no le debe quedar mal, pero aquí, como tantas cosas, son difíciles de conseguir, y si se consiguen, el previo ¡ni te cuento!
Rosa, ¿por qué hablas de «franceses»? …disculpa, me he perdido…
Sea como sea, estoy de acuerdo en las múltiples combinaciones culinarias que compartimos en muchos lugares distintos de la geografía, tanto nacional como no. Me encanta enriquecer vocabulario, ingredientes, métodos, trucos y sabores con la sabiduría tradicional y con las costumbres arraigadas a base de exprimir el uso popular y con tal de sacar mayor partido y provecho al campo y al trabajo por pura supervivencia. Esta receta creo que nació justo así!
Lo de los piñones no es imprescindible, menos aún cuando si disponer de ellos supone un aumento innecesario de precio para un plato tan sencillo y suficientemente rico en sí mismo, pero en mi tierra siempre hemos tenido la costumbre de incorporarlos, si ello es posible.
De todos modos, me apena leer las dificultades que comentas para conseguir muchos de los alimentos que por aquí son casi imprescindibles (no así los piñones, pero otras veces has hecho referencia a otros víveres…).
Gracias, como siempre, por comentar, por compartir y por opinar. Menos mal que internet no conoce de fronteras! Un beso,
Lo de los franceses es por el ratatuille, que es una receta francesa similar al pisto. También la zarzuela española (de pescado) es similar a la bullabesa (creo que esta mal escrito, espero me entiendas) a eso me refería.
Jo, Rosita! No te entendía… A veces soy un poco lenta. Gracias por la aclaración, con la que por supuesto, estoy de acuerdo! Un beso,