El pasado 16 de enero publicamos una receta: Arroz salvaje con salsa colorada, con la que participábamos en el
II Concurso Internacional de Recetas Pimentón Ahumado “La Chinata”
Nos permiten presentar dos recetas. Así que aquí va la segunda:
Quiche de alcachofa y kéfir de cabra al pimentón.
Realmente quería hacerla con queso al uso, pero cuando fui al súper habitual a comprarlo, se había agotado. En las neveras de los yogures vi el kéfir de cabra y pensé que podría dar un resultado similar, con un toque original. Lo probé, me gustó y éste es el resultado.
(Si por lo que sea no encontráis kéfir de cabra, podéis usar un queso líquido, tipo Quark, o incluso yogur líquido sin azúcar del tipo que queráis…)
Para darle alegría a la mezcla del relleno, unos taquitos de jamón serrano y para darle un punto «choricero» general, agregué color y sabor a la masa, mezclando en el preparado un cucharada sopera de pimentón ahumado, de manera que esta quiche cambia totalmente gracias a este ingrediente. Esta es otra de las cosas que me maravillan de la cocina: poner o quitar solamente uno de los componentes puede convertir en estrella un plato común.
Desde aquí, agradezco la oportunidad de este aprendizaje continuo que supone participar en un concurso donde se solicitan recetas originales, lo que implica el deber de desarrollar la intuición y el cuidado de la elaboración de cada receta. Es un reto, un paso más, un incentivo para mejorar y siempre compartir.
Espero que os guste!
Receta Quiche de alcachofa y kéfir de cabra al pimentón
Según la forma tradicional
Ingredientes (para 6 raciones)
Para la masa quebrada:
275 g de harina de repostería
130 g de mantequilla fría cortada a dados
65 g de agua fría
1 pellizco de sal
1 cucharada rasa de pimentón de la Vera ahumado dulce «La Chinata»
Para el relleno:
Aceite de oliva virgen extra
3 alcachofas grandes peladas y cortadas en 6 trozos (incluir además los rabos pelados)
1 cucharadita de tamaño postre, de pimentón de la Vera ahumado dulce «La Chinata»
1 ajo en unos 4 o 5 trozos
1 chorrito de agua mineral
2 huevos
200 ml de kéfir de cabra
50 g de jamón a taquitos finos o a lonchas desmigadas
Preparación
Masa quebrada salada:
1.- Mezclamos la mantequilla con la harina, ayudándonos de las puntas de los dedos, sin amasar (foto 1). Solamente hay que pellizcar la mantequilla e ir mezclando con la harina, poco a poco, hasta conseguir que quede todo integrado, momento en el cual la harina habrá tomado forma como de bolitas gordas, como si fuera arena (foto 2).
2.- Añadimos la sal y el pimentón (foto 3) y mezclamos todo, sin amasar, hasta que se torne todo el conjunto de un bonito color salmón.
3.- Formamos una bola (foto 4), la envolvemos en film transparente y la introducimos en la nevera durante una hora.
4.- Precalentamos el horno a 200ºC. Sacamos la bola de masa reposada del figorífico y la extendemos (sin amasar, siempre), aplastando la misma con la mano y luego con ayuda de un rodillo, la aplanamos e igualamos hasta formar una base con la que deberemos rellenar nuestro molde, forrado con papel de hornear o untado de mantequilla.
5.- Una vez acoplada la masa al molde, pinchamos la base para que no levante (foto 5), disponemos un papel vegetal en la superficie y lo rellenamos con habichuelas u otra legumbre (foto 6), para ayudarnos con su peso a que la masa se mantenga en el horno sin hinchar. Bajamos la temperatura, para hornearla en la altura baja del horno unos 15 minutos, a 180ºC.
6.- Sacamos (no apagamos el horno, que la volvemos a meter enseguida) (foto 7). Lista para recibir el relleno! 😉
Relleno:
1.- Con un chorro de aceite de oliva virgen extra, sofreímos a fuego lento en una sartén las alcachofas y el ajo. Añadimos una cucharadita tamaño postre de pimentón de la Vera ahumado dulce «La Chinata» (foto 8), removemos e inmediatamente agregamos un chorro de agua. Dejamos que lentamente se consuma el caldo, mentras cuece la alcachofa (foto 9).
2.- Reservamos los trozos enteros de alcachofa y separamos los rabos de alcachofa, el ajo y el jugo que haya quedado, todo lo cual lo meteremos en el vaso de la batidora, junto al kéfir de cabra y 2 huevos. Batimos (¡¡ojo!! No añadimos más sal porque el jamón en sí ya es muy salado y podríamos estropear la mezcla) (foto 10) y reservamos.
3.- Rellenamos la quiche: Ponemos los trozos reservados de alcachofa repartidos sobre la superficie de la masa horneada, junto a los trocitos de jamón (foto 11). Sobre todo lo anterior, vaciamos el contenido del vaso, que es el batido que hemos reservado en el punto 2 del relleno (foto 12).
4.- Horneamos a 180ºC en altura media del horno, durante unos 15 minutos. Sacamos y dejamos enfriar (foto 13).
Receta Quiche de alcachofa y kéfir de cabra al pimentón
Adaptación a Thermomix
2 horas aproximadamente
Ingredientes (para 6 raciones)
Para la masa quebrada:
275 g de harina de repostería
130 g de mantequilla fría cortada a dados
65 g de agua fría
1 pellizco de sal
1 cucharada rasa de pimentón de la Vera ahumado dulce «La Chinata»
Para el relleno:
Aceite de oliva virgen extra
3 alcachofas grandes peladas y cortadas en mitades (incluir además los rabos pelados)
1 cucharadita de tamaño postre, de pimentón de la Vera ahumado dulce «La Chinata»
1 ajo en unos 4 o 5 trozos
1 chorrito de agua mineral
2 huevos
200 ml de kéfir de cabra
50 g de jamón a taquitos finos o a lonchas desmigadas.
Preparación
Masa quebrada salada:
1.- Introducimos en el vaso de la Thermomix la harina, la sal y la mantequilla. Cerramos, seleccionamos Vaso Cerrado y pulsamos la tecla Turbo 3 veces consecutivas. Comprobaremos que no queden trozos visiblemente grandes de mantequilla. De ser así, habría que repetir un par de golpes más. Veremos que la mezcla tiene forma como de arena.
2.- Añadimos el pimentón y mezclamos 4 seg/vel 6.
3.- Agregamos el agua y volvemos a programar 6 seg/vel 6.
4.- Vaciamos el contenido del vaso y formamos una bola, sin amasar, solamente apretando los trozos sueltos hasta que se «peguen». La envolvemos en film transparente y la introducimos en la nevera durante una hora.
4.- Precalentamos el horno a 200ºC. Sacamos la bola de masa reposada del figorífico y la extendemos (sin amasar, siempre), aplastando la misma con la mano y luego con ayuda de un rodillo, la aplanamos e igualamos hasta formar una base con la que deberemos rellenar nuestro molde, forrado con papel de hornear o untado de mantequilla.
5.- Una vez acoplada la masa al molde, pinchamos la base para que no levante, disponemos un papel vegetal en la superficie y lo rellenamos con habichuelas u otra legumbre, para ayudarnos con su peso a que la masa se mantenga en el horno sin hinchar. Bajamos la temperatura, para hornearla en la altura baja del horno unos 15 minutos, a 180ºC.
6.- Sacamos (no apagamos el horno, que la volvemos a meter enseguida). Lista para recibir el relleno! 😉
Relleno:
1.- Introducimos en el vaso de la Thermomix el ajo y el aceite de oliva virgen extra. Colocamos la mariposa. Programamos 7 min/Varoma/vel 1.
2.- Añadimos las alcachofas (rabos incluídos) y programamos de nuevo 6 min/Varoma/Giro a Izquierda/vel cuchara. En el último minuto, agregamos por el bocal una cucharadita tamaño postre de pimentón de la Vera ahumado dulce «La Chinata»
3.- Inmediatamente echamos un chorro de agua (unos 80 g más o menos) y -sin poner el bocal- dejamos que lentamente se consuma el caldo, mentras cuece la alcachofa durante 10 min/Varoma/Giro a la Izquierda/vel cuchara.
4.- Quitamos la mariposa, sacamos los trozos enteros de alcachofa (cuando se enfríen, cortamos en trozos más pequeños y reservamos para el relleno) y dejamos en el vaso los rabos, el ajo y el jugo que haya quedado, a lo cual le añadimos enseguida el kéfir de cabra y 2 huevos. Batimos (¡¡ojo!! No añadimos más sal porque el jamón en sí ya es muy salado y podríamos estropear la mezcla) 15 seg/vel 5-10 progresiva y reservamos.
5.- Rellenamos la quiche: Ponemos los trozos reservados de alcachofa repartidos sobre la superficie de la masa horneada, junto a los trocitos de jamón. Sobre todo lo anterior, vaciamos el contenido del vaso, que es el batido que hemos reservado en el punto 2 del relleno.
6.- Horneamos a 180ºC en altura media del horno, durante unos 15 minutos. Sacamos y dejamos enfriar.
Muy buena la receta, la haré. Con algunos cambios. El Kefir de cabra, que aquí no lo hay, por suero de leche cremoso, y el pimentón ahumado, por pimienton en polvo vulgar y silvestre de los que me traje de España en mi último viaje. Por ahí conseguí una receta de tarta de puerros que también me gusto mucho, están en lista para hacerlos. Yo tengo un utensilio que se llama estribo, que lo utilizo para mezclar la harina con la mantequilla, lo tengo desde hace muchos años, es muy práctico.
Genial que acoples la receta a tus ingredientes y a tu gusto! (muy lista tú, aprovechando tus viajes para hacer acopio de cosillas para tus guisos.. 😉 ). Seguro que haciéndola así te sale igual de rica (o más).
El estribo debe ir fenomenal para mezclar mantequilla y harina, sobre todo cuando -como en este caso- necesitamos que la mantequilla se mantenga fría, sin derretirse al contacto de las manos… La verdad, no sabía lo que era y gracias a tu comentario me he enterado: es un utensilio en forma de U, metálico. Yo jamás he tenido ninguno, así que no lo he llegado a usar. Pero si lo veo me lo compraré.
Muchas gracias por comentar, Rosa. Un abrazo,
Si es en forma de u y tiene varios alambres o varillas, para que quede la mezcla gránulosa , yo tengo uno que heredé de mi suegra y otro que compré yo.
Paloma, esta receta, para mí, es sólo para leer, mirar y admirar….no está a mi alcance, sobre todo si pienso en que la tuviese que inventar para concursar con los mejores!….. Pero, como se lee en las memorias del emperador M. Aurelio: «alegra tu corazón con los dones en los que te aventajan tus semejantes»..Paloma, me alegra con tu creatividad, con lo bien y claro que escribes la introducción y la receta, con el coraje que tienes para competir con los mejores y con la estupenda secuencia fotográfica que acompaña a la explicación…este blog me gusta mucho: a mi modesto entender, tiene mucha calidad humana y gastronómica!!. Mi enhorabuena, suerte y un fuerte abrazo!
Gracias por tu apoyo, Bernardo! Pero sobre la invención de la receta he de decirte que yo solamente he conjugado los ingredientes para el relleno… y eso no tiene tanto mérito! La quiche existe desde el siglo XVII, según Wikipedia y proviene de Francia. Consiste en la preparación de una masa quebrada, tipo brisa, que se se suele rellenar de una salsa hecha con lácteos y huevos, acompañada normalmente de verduras y algún producto cárnico tipo beacon. La técnica para su elaboración, también es la propia de dicha masa quebrada (por cierto, super fácil de hacer), solamente que yo le he añadido una cucharada de pimentón de la Vera. Eso le da color y un sabor «choricero» (a mí me lo parece) con un toque muy rico en mi opinión (siempre y cuando los ingredientes del relleno armonicen con ese sabor…). Como ves, mi «invención» no difiere mucho de preparar una pizza o una tortilla con los rellenos que a uno se le ocurren según lo que tenga por casa o le apetezca en el momento.
Ahora bien, la secuencia fotográfica sí que me gusta, la verdad! Queda todo mucho mejor explicado y creo que vale la pena. La verdad es que lo debería de hacer en todas las recetas, pero no tengo tiempo físico suficiente, ya que hacer cada foto interrumpe constantemente la práctica de la receta y lo que tardaría en hacer media hora, me cuesta dos! Luego, hay que editar las fotos, comprobar los niveles de luz, color, etc… recortar, en su caso, poner la marca de agua y reducir el tamaño de las mismas para poderlas subir al blog sin demasiado peso… eso es otra horita más, por poner algo… total, que el preparado de esta quiche, de 2 horas -reposo de la masa incluído- se convirtió en 5 horas… no puedo dedicar todo el fin de semana al blog; en casa me reclaman! Lo que pasa es que queda muy chulo y me tiro a la piscina con una facilidad… en fin, que al menos agradezco muchísimo que valores tanto este trabajo, de verdad.
Muchísima gracias. Un fuerte abrazo,