Es un reto para alguien como yo, acostumbrada a cocinar las suculentas recetas tradicionales, siempre acompañadas de carnes, embutidos y diferentes tipos de grasas procedentes en su mayoría del reino animal, el plantearse la posibilidad de convertir esos platos en su versión vegana, por un planeta más limpio, por una manera de comer más consciente, por una alimentación sostenible, que consiga que haya «para todos» y no solamente alimente las bocas de las clases más ricas (que no más «desarrolladas») de nuestra amada Tierra.
Las lentejas: nutritivas y baratas
Las lentejas son un ingrediente fácil de preparar, versátil y nutritivo.
Pertenecen a la familia de las leguminosas. Son una fuente de proteína vegetal y aportan gran cantidad de fibra. Son ricas en hierro, folato y manganeso.
Su precio es muy asequible al bolsillo y tienen grandes beneficios para la salud.
La evidencia sugiere que incluso pueden protegen la salud del corazón.
El ajo en la cocina y en la Medicina
El ajo es una planta perenne que pertenece al género Allium, y está estrechamente relacionado con la cebolla. Ha sido utilizado por los seres humanos desde hace miles de años y fue utilizado en el antiguo Egipto, tanto para fines culinarios como por sus beneficios para la salud.
Los registros indican que el ajo estaba en uso cuando se construyeron las pirámides de Giza, hace unos cinco mil años.
Las semillas de sésamo: anticolesterol y antienvejecimiento
Las semillas de sésamo
Una de las primeras semillas oleaginosas que conoce la humanidad, las semillas de sésamo, ha sido ampliamente empleada como medicamento y como alimento por sus propiedades nutritivas, preventivas y curativas.
La semilla del sésamo es una importante fuente de fito-nutrientes como los ácidos grasos omega-6, antioxidantes, vitaminas y fibra dietética con potencial anticancerígeno y propiedades promotoras de la salud.