Hace ahora algo más de dos años que dejé de comer carne. Empecé con la conciencia alterada al enterarme de que el consumo actual de carne en el planeta supera con creces la posibilidad de producción para abastecernos todos; que se necesitan proporcionalmente hablando 40 raciones de cereal para alimentar el equivalente a una ración de carne de vacuno, es decir que si en lugar de dárselo a la vaca, se lo damos a las personas, el hambre en el mundo desaparecería. Esto es así: no es sostenible lo mires por donde lo mires. No digo que todos dejemos de comer carne (eso depende de cada cual). Pero solo con reducir el consumo se conseguiría mucho.
Luego llegó el cáncer y me la prohibieron. Llovía sobre mojado.
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